Uff, esto de internet no está en todos los sitios, y nos dá una imagen de rio Guadiana que no veas, aqui sale, y allí desaparece, en fin, tengo escrito lo que iba a poner por lo que lo transcribo literalmente. Antes de seguir os queremos decir que estamos sorprendidos de la gente que vé este modesto blog, hoy hemos podido leer los comentarios y a los dos se nos han caido las lágrimas, nos emocionais y esto nos dá muchisima fuerza, de verdad, sois una pasada !!. Nosotros tenemos ganas de llegar a Santiago y haceros partícipes de la belleza del Camino a todos vosotros.
Vamos allá, la 4ª etapa empieza en Nájera 448 m. de desnivel, velocidad media 9,5 km/h y 6 horas y con 6 minutos dándole a las manivelas.
Se me olvidó contar que una vez colocados en el albergue de Nájera se nos apareció Jesús,.... no el Jesús que todo el mundo pueda pensar, ni estamos iluminados ni nada de eso, sino el Hospitalero de Nájera, y de pronto nos dejó sin saber como reaccionar, se fundió en un abrazo con cada uno de nosotros, tranmitiéndonos una fuerza inusual, y deseándonos que tuvieramos buen Camino. Mi reacción en principio fué.... pues la que cualquiera de vosotros tendría cuando un desconocido viene te abraza y abraza a tu mujer. Sin embargo, al ir pasando la tarde-noche, le seguiamos dando vueltas sin querer, y cuando ayer martes nos despediamos por la mañana, no pude más que decirle que hace falta que mucha gente como él, sin interés, sin pretensiones, nos dierá un abrazo sincero. Dicho esto que para mi es mención aparte, pasamos a contaros lo que no pudimos hacer estos dias anteriores.
Nos levantamos con ese ritual que ya empezamos a tener, ...lavabo...higiene....,ropa....recoger sábana bajera, saco de dormir, organizar las mochilas y a las bicicletas, a montar la feria. Por cierto, las bicis durmieron por vez primera a la interperie, con nuestras consiguientes dudas de encontrarlas al día siguiente, pues eran las únicas en ese albergue.
Después de despedirnos de Jesús y Herbé, los hospitaleros de Nájera, pusimos rumbo a Azofra, un pueblecito 5 km. arriba para irnos despertando. Fuimos pasando caminantes a los que no nos cansamos ( y ellos tampoco) de desear Buen Camino!!, y llegamos sobre las 11 a Sto. Domingo de la Calzada, allí nos hicimos fotos delante de la catedral, y Montse entró a ver si realmente estaba la gallina que dice la tradición que cantó después de asada, pero no, debió pasar Carlos del K2 y las debió servir a algún catllarenc porque no estaba.
En su lugar había un gallo y una gallina vivitos y cacareando. En fin, bromas aparte nos encontramos con varios bicigrinos que normalmente vemos en la ruta, José Manuel un madrileño de Carabanchel, rockero, una parejita de Tolosa Javi y Ana.
Montse fué a hacer la compra de fruta y de dos buenisimos bocatas y bebida para reponer fuerzas, nos hacemos las fotos de rigor y nos ponemos rumbo a Belorado. Yo creo que nos quedamos allí, aunque los consejos de mi hermano Javi es que fueramos a Vilafranca de Montes de Oca, pero como no me habla demasiado bien del albergue, pues dejo que sean las fuerzas de Montse las que digan hasta donde llegamos. No quiero olvidarme de decir que estamos viendo unos paisajes encantadores, a mi particularmente me gusta parar a ver desde cualquier montículo el camino que hemos hecho, como la vida misma, siempre hay que parar y echar la vista atras para valorar donde hemos llegado, o donde estamos , pienso que es un buen símil de la vida de cada uno , pasas por penurias ( cuestas y repechos) y disfrutas de las bajadas ( los mejores momentos de la pareja), y normalmente casi siempre tenemos los recuerdos de lo mejor que nos va pasando. Aunque no dejamos de pensar en lo que nos queda, pero los que habeis hablado por teléfono con nosotros, notareis que lo estamos disfrutando y con la esperanza de disfrutarlo a tope, por eso lo contamos y os hacemos partícipes.
Hoy nos planteabamos que no estaría nada mal hacer el Camino a pie, pero eso será otro año y harina de otro costal.
En fin, una vez en Belorado y viendo los albergues que podiamos ir, encontramos uno que nos hacía tilín, chiquitito, máximo 10 personas, pero estaba 8 km. más alla. Montse ha dicho vamos !!, aunque a los 5 km a empezado a remugar y refunfuñar ( yo me quedo aqui, estoy muerta !! son las palabras que aqui puedo decir) pues en las 2 últimas jornadas los 3 últimos kms. se hacen interminables. Al fin, llegamos a Espinosa del Camino, pueblecito de 24 habitantes, allí está el albergue "La Campana" de Josep ( alias Ernest Hemingway) y menos mal, empezabamos a pensar que todos los hospitaleros eran extranjeros.
Lo dicho, albergue chiquitito, muy cuidado, todo lo limpio que lo puede tener un señor, 15 euros dormir, cena ( paella) y desayuno. Eso si, las bicis otra vez a la calle. Nos pegamos una buena ducha caliente y descansamos de los albergues de 100 personas que hasta ahora hemos "disfrutado".
La paella estaba deliciosa y en la casa eramos nosotros y 3 alemanes, cenamos a las 7,30 h..... como en El Catllar. Después un cortadito en el bar del pueblo y chupito de orujo. Ahora mismo Montse ya duerme hace mas de media hora y son las 21,30. Yo también me voy a dormir porque resulta que este señor ( el hospitalero) fué corneta en la mili, y nos ha amenazado de tocar diana con la corneta a las 7. En fin mañana mas !!.
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